








1. La Población
El
número de personas
que viven en el mundo ha ido creciendo a lo largo de la
historia y su distribución en los distintos países es
diversa: unos países tienen mucha población y otros
poca.
Hasta
el siglo XV
(antes de 1500) el crecimiento era muy lento. Muchas
personas morían a causa de las guerras, las enfermedades
y el hambre.
En
los siglos XVI y XVII
el crecimiento fue moderado,
por la menor incidencia de las epidemias.
En
los siglos XVIII, XIX, XX
y lo que va del XXI
el crecimiento ha sido muy rápido, por los avances de la
Medicina y la mejor alimentación.

La
población
crece
cuando los nacimientos superan a las defunciones, es
decir, cuando la natalidad es superior a la mortalidad.

Como
a nivel mundial las superficies
usualmente se expresan en kilómetros cuadrados, la
densidad obtenida comúnmente corresponde a habitantes
por km².
La pirámide
de población o pirámide
demográfica es
un histograma que está hecho a base de barras cuya altura es
proporcional a la cantidad que representa la estructura de
la población por sexo y edad.Gráficamente se trata de un
doble histograma de frecuencias. Las barras del doble
histograma se disponen en forma horizontal, se indican los
grupos de edad de la población masculina a la izquierda y
los que representan la población femenina a la derecha.


A
su vez, en el eje de las ordenadas se
disponen e identifican los grupos de edad, por lo general,
de cinco en cinco años (0 a 4, 5 a 9, 10 a 14, etc.),
colocando las barras de menor edad en la parte inferior del
gráfico y aumentando progresivamente hacia la cúspide las
edades de cada intervalo.









Prescindiendo de las desigualdades
causadas por las
diferencias de tamaño entre las unidades territoriales
de primer nivel en que se divide el continente europeo,
con microestados de elevada densidad como Mónaco (más de
16.400 hab./km2), Malta (1.200 hab./km2) o San Marino
(430 hab./km2), y estados de tamaño diverso escasamente
poblados como Islandia (3 hab./km2), Noruega (15
hab./km2), los poco más de 700 millones de individuos
que habitaban en Europa en el año 2000 se distribuyen
siguiendo un sistema centro-periferia, localizándose las
regiones más densamente pobladas (más de 150 hab./km2)
en un eje que cruza el continente desde el S del Reino
Unido hasta Italia, pasando por el N de Francia,
Bélgica, Luxemburgo, Alemania y Suiza, mientras que los
extremos meridional y septentrional presentan, en
general, una menor ocupación.
Las características
más importantes de la población
europea son el envejecimiento y la inmigración.








